Los investigadores de la tragedia de la macrofiesta en el Madrid Arena, en la que murieron la madrugada del miércoles al jueves tres jóvenes y otras dos siguen ingresadas en estado crítico, apuntan como causa de la estampida en la que perecieron asfixiadas y aplastadas a un cúmulo de tres factores que concurrieron de forma letal en el mismo momento: dos grandes movimientos de personas hacia fuera y hacia centro que confluyeron en el pasillo central, la entrada sin control de cientos de jóvenes y el estallido de al menos una bengala.
Sobre las tres de la madrugada comenzaba la actuación de la gran estrella de la fiesta, el estadounidense de origen asiático Steve Aoki, uno de los superdj jóvenes mejor pagados del mundo. En ese momento, siempre según la hipótesis de la policía, dos movimientos importantes de gente coincidieron y chocaron en el mismo vomitorio: los que ya habían tenido suficiente y querían marcharse de la fiesta y los que pensaban que lo bueno estaba a punto de empezar y querían entrar en la pista central a disfrutar del electro-house de Aoki.
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